domingo, 22 de marzo de 2015

Los García (tras la muerte)

       Siempre ha parecido que la historia de la familia García Lorca se detuvo en seco en una madrugada de agosto de 1936, cuando unos asesinos destrozaron a tiros el cuerpo del poeta granadino. Pero la vida de la familia no se detuvo nunca. Continuó marcada y herida, durante décadas. Y eso es lo que ahora viene a recordar el sobrino del poeta, Manuel Fernandez-Montesinos.
       "No quiero volver a ese jodio país".  La frase escueta, directa, fue escupida entre los dientes  por Federico Garcia Rodriguez, el padre de Garcia Lorca, en el verano de 1940, cuando la familia embarcaba en el Marques de Camilla hacia el exilio en Estados Unidos. Manuel Fernandez-Montesinos, entonces un niño de ocho años, supo al oírla que algo se había quebrado en su mundo  
       Lo que Fernandez-Montesinos relata es el "después" de la muerte del autor de Poeta en Nueva York. El sobrino del poeta recuerda sustanciosas anécdotas que vivió en Nueva York, como una visita de Juan Ramon Jimenez a la familia. "La llegada de  Juan Ramon Jimenez fue para mi decepcionante". " Nada mas aparecer por la puerta se creo un clima de tristeza entre abrazos y lloros que yo no entendí entonces".
       Fernando-Montesinos era hijo de Concha Garcia, la hermana del poeta. Toda la familia fue acogida en Estados Unidos por Fernando de los Rios, que terminaría convirtiéndose en el suegro de Francisco Garcia Lorca y en un ´tío´ mas de la familia.  

1 comentario:

  1. - Tildes...
    - Aparte del libro del sobrino de Lorca, podéis buscar en más fuentes...

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